Llámanos

En este artículo haremos hincapié en varios aspectos a tener en cuenta de la vida de nuestra voz, que son determinantes a la hora iniciarse en el canto.

Está claro que cuanto más joven se es, mejor está nuestra voz. Pero esta circunstancia tampoco nos garantiza nada. Es importante, tener en cuenta otros condicionantes, que son los que pueden determinar cuál es la mejor edad empezar a cantar.

¿Por qué decimos que cualquier edad es buena para empezar a cantar?

Porque la voz, con un buen entrenamiento vocal no envejece. Siempre es posible revertir los efectos de la rigidez vocal, o del paso del tiempo en nuestra voz. La clave está en la técnica vocal, que nos ayudará como el mejor tratamiento anti-edad a prevenir, tonificar y rectificar malos hábitos adquiridos.

Si yo te dijese que la edad óptima para iniciarte en el canto está entre los 18 y 25 años, por ejemplo, te estaría condicionando. De modo que si tienes menos de esa edad pensarás que tienes que esperar y si tienes más, dirás que ya se te pasó la hora.

La realidad es que no hay garantía de nada porque, en mi experiencia como profesor de canto, he dado clases a alumnos de estas edades que han venido con severos problemas con la voz (que se pueden solucionar perfectamente), que quizás otros alumnos con mucha más edad no han tenido.

Veamos a continuación las ventajas de empezar con el canto en las distintas etapas de nuestra vida.

Empezar a cantar en la infancia y pubertad

Tener una voz joven no lo es todo. En mi experiencia en mis clases de canto en Madrid, el escollo más importante que deben salvar los alumnos más jóvenes, es el de la constancia y la concentración, y, también hay que decirlo, de la actitud.

No se puede tratar ni enseñar igual a un niño o niña de 10 años que a un adulto de 50 años. Hay que tener, además, especial cuidado con la voz en la época de la pubertad, dado que es el período de tiempo en el que cambiamos la voz. El éxito en la formación en estos años, depende en mucho, de cómo lo encare el maestro, y de la actitud del alumno.

En la infancia y hasta la pubertad, la garganta está lo que vulgarmente se conoce como “abierta”. ¿Qué significa en el argot musical tener la garganta abierta? Significa que es relativamente más fácil colocar la voz.Una buena colocación de la voz nos permitirá tener un timbre más rico en armónicos y aumentar nuestra potencia. Por tanto es un buen punto a favor para iniciarnos en el canto a una edad temprana.

¿Qué pasa cuando cambia la voz en la adolescencia?

En principio, si ya estás haciendo una buena técnica vocal, no tendría que pasar nada en especial. Si no se está haciendo técnica, los cambios serán más que evidentes, con el consiguiente conflicto personal y psicológico que la circunstancia puede acarrear.

Si no has recibido lecciones de canto antes, es posible, y aconsejable, iniciarse en el canto en esta etapa de la vida.

Empezar a cantar en la juventud y madurez

Muchos jóvenes cantan sin considerar necesario hacer entrenamiento ni técnica vocal, piensan que “pueden con todo”. Sin embargo nada más lejos de la realidad.

Hay quien se dedica profesionalmente al canto y no es consciente del grave daño que está causando a sus cuerdas vocales.

Es un hecho que todos aquellos que trabajan con profesionalmente en el canto, o la locución se lastiman la voz más rápidamente.

El ejemplo más práctico lo tenemos en la cantante Adele. Una chica joven que tiene muy bonita voz, pero que ya arrastra dos operaciones de cuerdas vocales. El motivo: no ha hecho nunca técnica vocal. 

¿Son buenas las operaciones de cuerdas vocales?

Como profesional del canto mi consejo es evitarlas.Porque se corre el riesgo si hay más de dos operaciones de contraer cáncer de cuerdas vocales.

¿Qué ventajas tiene empezar a cantar antes de los 40 años?

La prevención 

Las clases de técnica vocal son un sistema excelente de evitar daños que nos dejen sin voz y, en última instancia nos hagan pasar por el quirófano.

Si no tienes técnica, notarás que a la tercera o cuarta canción la garganta empezará a dar señales de alarma, con molestias y picores. Estás forzando las cuerdas y lastimando tu garganta. Imagina que tienes un concierto de dos horas, el daño puede ser enorme.

Mejorar tu técnica pudiendo actuar sin molestias

Con una base sólida en técnica vocal, notarás que cada vez tienes más impostada la voz, y podrás actuar durante una, dos o tres horas sin notar picor, ni destrozarte la garganta por el sobreesfuerzo.

Ventajas de empezar a cantar a partir de los 40 años

A partir de esta edad, debemos abandonar el concepto de prevención y mantener la misma ilusión  y ganas por iniciarnos en el noble arte del canto.

Hemos cumplido 40,50, 60 años, o incluso 70 y nos preguntamos, ¿tenemos edad para aprender?

La respuesta es categóricamente sí.

Por experiencia en mis clases de canto en Madrid, con alumnos de estas edades, puedo asegurar que tienen una ventaja con respecto a alumnos más jóvenes: la constancia, la dedicación y el tener un orden vital que ayuda en mucho con el entrenamiento de técnica vocal.

Porque hablamos de técnica pero sobre todo necesitamos entender que para cantar bien necesitamos rectificar malos hábitos adquiridos (y si hemos estado cantando por libre, serán aún más evidentes), y el único modo de rectificarlos es con un buen entrenamiento.

Si no tenemos técnica vocal, el rango vocal se va reduciendo con el paso de los años. Esto quiere decir, que podremos cantar menos notas.

¿Podemos recuperar la voz perdida con la edad?

Sí, es posible siempre con entrenamiento vocal. Como hemos dicho anterioremente, la mejor medida antiedad que existe.

La voz envejece pero con la técnica vocal podemos recuperarla aumentando el rango vocal, sin lastimar nuestras cuerdas, mejorando la sonoridad y notando una evidente mejoría.

Si llegados a este punto te preguntas si es necesario entrenar la voz a cualquier edad

Te diré que es de obligado cumplimiento pasar por este trámite, si no quieres sufrir innecesariamente ni destrozar tus cuerdas vocales.

Pongamos el ejemplo de un deportista y lo comprenderemos inmediatamente. Un tenista, por ejemplo, necesita entrenamiento diario para sacar el máximo rendimiento a su esfuerzo. Con la voz, pasa lo mismo, nuestros músculos tienen memoria, si los ejercitamos del modo incorrecto se hace necesario rectificar cómo los usamos, para que nuestro sistema incorpore los nuevos movimientos de manera inconsciente.

El objetivo, pues, es reconducir nuestro esfuerzo muscular. Para hacer esto lo más aconsejable es tener a un entrenador vocal que consiga encauzar estos buenos hábitos y expulsar los malos de nuestro aparato fonador.

Artículo redactado por Diego Kaminsky, profesor de canto.

Llámanos